jueves, 3 de febrero de 2011

Unos que vienen y otros que se van


Cual fue mi sorpresa el lunes, al ver que Barcelona daba un paso más hacia la total eliminación de grandes monumentos de la época franquista. Esta vez, la aplicación de la Ley de la Memoria Histórica volvía a hacer acto de presencia: se retiraba la estatua de la Victòria de Frederic Marès, símbolo del triunfo de los nacionales en la Guerra Civil. Ésta efígie fue escogida, hace ahora, 70 años, conmemorando la hazaña de los 'vencedores', pero hasta ésta tuvo que sufrir la censura de la época y le propusieron que se tapara un poquito, ya que verla tal y como Dios la había traído al mundo era una absoluta obscenidad. Haciendo caso a lo dicho, el escultor se vio 'obligado' a añadirle una túnica y un poquito de honradez a la susodicha. Finalmente, la figura ha sido relegada y próximamente pasará a formar parte de la colección museística de la ciudad.

Pero lo bueno dura poco, y os tengo que contar que la 'superpandi' de Mariano Rajoy ya ha hecho de la suyas. No tardaron ni 24 horas en ofrecer una 'magnífica' propuesta (no se como no se nos ha ocurrido antes...) a través de la cual nos han hecho saber que tienen en mente exponer la posibilidad de poner un monumento referente al Rey donde antes se encontraba la Victòria. Esto me hizo pensar en el por qué de las prisas por parte de los populares: ¿echan de menos símbolos de aquella época o su gran 'gusto' estético les ha dado esa 'brillante' idea? (ya me imagino... a Juanca a lomos de un caballo...). Esperemos que todo haya sido una broma, con el objetivo de tener un minuto de gloria en algún programa-zapping, como es el caso de nuestro querido APM? (tal vez algún popular quiera aspirar a ser l'Homo APM? en un futuro próximo).

Este inicio de semana también fue protagonizado por ZP, ya que si el PP tuvo su convención el domingo anterior, éste le tocaba al PSOE. José Luís declaró estar hasta la coronilla del debate sucesorio respecto a su papel como presidente del gobierno (bueno, tal vez esas no fueron las palabras exactas, pero seguro que era lo que pensaba mientras daba su discurso). Agradeció el apoyo que estaba obteniendo por parte de sus compañeros de partido (los cuales son como aquel amigo que todos tenemos, el cual, delante de un contratiempo, nos dice que todo saldrá bien... sabiendo que el asunto acabará como 'el rosario de la aurora').

Pero volvamos al 'partido de las gaviotas' (aunque yo creo que son más bien, algún tipo de ave carroñera), y a sus miembros, le toca el turno a dos de las 'chicas' con más tirón del partido (aunque esta vez, dejemos al margen a la niña de Rajoy... Sorayita Sáenz de Santamaría). Las dos políticas a las que me refiero son: Esperanza Aguirre la Iluminada y, mi debilidad, políticamente hablando, Mª Dolores de Cospedal (con la que únicamente comparto la procedencia, sí somos manchegas).
En cuanto a la primera, ha decidido, que con motivo de las elecciones municipales del 22 de mayo, no basta con una o dos campañas publicitarias. La señora ha decidido que se lleven a cabo hasta OCHO campañas (como podemos comprobar nos da un claro ejemplo de lo que entiende el PP de Madrid por restricciones presupuestarias, debido a... ¿cómo era?... ¡Ah, sí! ¡CRISIS! … pero que no cunda el pánico). Respecto a la segunda, podríamos clasificarla en el grupo de personas a las que les gusta tirar la piedra y esconder la mano. Sí, la Secretaria General del PP, declaró que el PSOE de Castilla La-Mancha espiaba al PP de la misma comunidad autónoma, algo inmoral en política. Bien, pues después de soltar tal acusación, la señora cree que no es conveniente ni procedente la presentación de pruebas referentes al asunto (dí que sí Dolores, tú a lo tuyo...).

Por último, me gustaría hablar muy brevemente de las revueltas que nos han acontecido esta última semana en el mundo árabe. Como ya sabréis, la última protesta, se ha producido en el Egipto de 'Hosni Mubarak De Aquí No Me Mueve Ni Dios', éste se niega a dejar el poder, mientras la población está dividida entre sus seguidores y sus opositores, enzarzados en un ambiente de violencia por parte de los que están a favor del 'presidente' egipcio y gritos de ¡No a la reelección, no a la sucesión!, por parte del otro grupo de ciudadanos. Y es que no debemos caer en la tentación de centrar nuestra atención en el revuelo que están creando las manifestaciones por los diferentes países, sino en el motivo por el cual se están llevando a cabo: acabar con décadas de silencio y poco a poco, hacer realidad lo que era impensable hace unas semanas, hacer tambalear los regímenes dictatoriales árabes. 

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